Cuando nacemos llevamos una carga genética que determina en gran parte como seremos, el color de ojos, la forma de la nariz, los gestos, la estatura, la sonrisa e incluso la actitud.
Gran parte de ello permanecerá por siempre con nosotros, pero lo demás se irá construyendo poco a poco.
La educación irá moldeando nuestras respuestas, los recuerdos recrearán o no nuestro corazón.
Pero son las experiencias, buenas o malas, las que terminarán por decidir lo que somos.
Saber aceptarlas o enfrentarlas es la gran lección que aprender.
Seremos fuertes, sensibles, decididos o débiles, o todo junto, pero habremos creado ese yo que somos hoy.
Con cada retal se puede ir cosiendo y diseñar el vestido que nos arropará, crearemos la imagen de lo que somos y, si no nos gusta, sólo hay que descoser y volver a diseñar, pero los retales de nuestra vida serán siempre los mismos, solo hay que colocarlos en el lugar adecuado para que no desentonen y dejen de influir en lo que queremos ser.
Somos lo que somos por que hemos vivido, eso no significa que no podamos cambiar aquello que no nos gusta, solo hay que adaptarlo a nuestra medida.
Y siempre podemos elegir, hasta en los momentos más duros se puede llevar con dignidad o llorando por las esquinas... afrontemos los miedos y no echemos la culpa a los demás o a la mala suerte.
ResponderEliminarPor cierto, me gusta mucho tu selección musical.
Un beso
Hola Lamar.
ResponderEliminarCreo que nos vamos "construyendo" día a día, vivencia a vivencia. No creo que los genes nos marquen más allá de ciertos rasgos físicos. Creo que el carácter se forja con todo aquello que vives. Pero sobre todo pienso que somos nosotros los únicos responsables de lo que somos.
Besitos de jengibre.
Hola Javier. Así es, decidimos nosotros y no los demás. Gracias guapo;)
ResponderEliminarUn abrazo enorme
Hola Jengibre. Hay veces que esa "construcción" resulta deficiente y hay que reforzarla, cambiar lo que nos daña y convertirlo en soporte.
ResponderEliminarUn abrazo enorme
Cuanta razon en tus palabras, LaMar, hay cosas que no podremos cambiar, por ejemplo las enfermedades que vienen en la carga génetica, pero nuestras actitudes pueden moldear nuestra conducta, así como las vivencias que vamos adquiriendo. Un fuerte abrazo mi niña
ResponderEliminarEs la canción amiga "Se hace camino al andar" un abrazote.
ResponderEliminarLos retales son como los juegos de construcción, depende de nosotros lo que hagamos con ellos, y las veces que lo hagamos y deshagamos, pero la decisión es solo nuestra.
ResponderEliminarMe gusta tu diseño :).
Besos grandes.
En definitiva todos escribimos nuestra propia historia... es bien cierto que somos lo que somos. Y en nuestra mano está que al mirarnos al espejo nos guste lo que veamos.
ResponderEliminarAlguién dijo: Somos lo que somos... por lo que hemos sido.
Preciosa entrada amiga... y estupenda "banda sonora" la que la acompaña.
Lamar...
ResponderEliminarComo decia Ortega y Gasset "Yo soy yo y mis circunstancias". Y es cierto que todos venimos al mundo con un patrón físico definido pero el entorno y nuestras vivencias moldearan nuestro carácter y la forma de ver la vida. Buena reflexión amiga.
Un beso
Muy cierto todo lo que dices en tu post. Me ha gustado mucho. Es verdad que a veces nos empeñamos en echarle la culpa a la mala suerte de algunas cosas que nos suceden, pero todo, es producto de nuestras decisiones. Y esas decisiones, vienen marcadas por nuestra forma de ser, nuestro temperamento, nuestra esencia. Ésa es única e instransferible, la que nos diferencia del resto de personas. Y sí, cada uno debe colocar sus propios retales de la forma que crea oportuna. No importa cuántas veces los cambiemos de sitio, lo que cuenta, es estar a gusto con el resultado.
ResponderEliminarUn beso muy fuerte LaMar
Hola R.C. Así es mi niña :) yo no lo habría dicho mejor.
ResponderEliminarUn abrazo enorme
Hola Fiaris. Si, hay muchas letras que se pueden adaptar para nuestro camino. Gracias mi niña ;))
ResponderEliminarUn abrazo enorme
Hola Nikkita. Y la mejor prueba de ello son los héroes reales de tus historias, ellos decidieron lo que querían ser, podían no haberlo hecho, pero se arriesgaron. Gracias mi niña ;)
ResponderEliminarUn abrazo enorme
Hola Anita. Y esa historia puede pasar desapercibida o dejar huella. Hoy yo prefiero marcarme, tatuarme, da igual, crear mi yo real y lucirlo. Gracias mi niña ;)
ResponderEliminarUn abrazo enooooooorme
Hola Felix. Así es. Podemos dejar que nos ahoguen o aprender a nadar. Prefiero salir a flote. Gracias cordobés de mi arma ;))
ResponderEliminarUn abrazo enorme
Hola Magda. A veces, dejamos que nos influyan los demás ¡error! en mi caso lo empiezo a ver ahora y no quiero que nadie moldee quien debo ser. Solo yo tengo derecho a decidir quien y que quiero ser. Gracias mi niña ;))
ResponderEliminarUn abrazo enorme
Muy interesante la reflexión amiga: ideal para explicarle a las personas que piensan que alguien no tiene remedio o que nunca cambiará. También creo que valdría para reflexionar sobre aceptar a las personas como son y no cambiarlas, peor sin duda tratar de superarnos siempre nos viene bien.
ResponderEliminarUn beso enorme
Me gustó la metáfora del vestido, aunque a veces nos hubiera gustado cambiar la piel como las serpientes jejejeje...
ResponderEliminarEn el destino no hay nada escrito, somos libres para elegir el camino y los trozos de tela que vamos añadiendo.
Excelente, como siempre... Un abrazo muy grande.
Hola Tani. Gracias mi niña ;) Buena reflexión, y sobre cambiar a los demás ¡uf! nunca he estado de acuerdo con eso.
ResponderEliminarUn abrazo enorme
Hola Alondra. Tienes razón, a veces caemos en la tentación de querer cambiarlo todo ;) Gracias mi niña.
ResponderEliminarUn abrazo enorme
Hola guapa, asi es, somos lo que
ResponderEliminarsomos y no hay que darle mas vueltas. un placer pasar por tu
bonito blog.
feliz semana.
Todas esas experiencia son las que nos van moldeando, las que harán que en determinadas ocasiones respondamos de una u otra manera, se podría resumir en la frase:
ResponderEliminar"Yo" soy yo y mis circunstancias"
Todo lo que vivimos nos define como personas, y construye la mayoría de lo que somos, lo que vivimos va a determinar en gran medida nuestro caracter.
ResponderEliminarA veces se puede cambiar y otras veces no, yo creo que llegado a un punto es dificilimo hacerlo. Somos demasiado complejos e enrebesados.
Saludillos y perdón por el pesimismo.
Hola Ricardo. Si, pero siempre podemos hacer algún arreglillo :) Gracias guapo.
ResponderEliminarUn abrazo enorme
Hola Canoso. Si, pero no hay que dejar que esas circunstancias te puedan, tienes que ser tú el que decida.
ResponderEliminarUn abrazo enorme
Hola Fazulas. ¿Hablamos de pesimismo? ¡Bien! Llevo más de tres años sumida en una profunda depresión y al final he aprendido que hay cosas que no puedo dejar que me superen. Son experiencias vividas que tengo que relegar para poder continuar y ahí radica el cambio. Siempre podemos y debemos intentarlo.
ResponderEliminarUn abrazo enorme
Hola laMar:
ResponderEliminarSe me había pasado este post. Menuda polémica.
Con lo que me gusta debatir. =P
Es para bromear un poco.
Estoy de acuerdo con todo lo que dices y lo que aporta cada uno en cuanto hay que seguir adelante, y claro que cuesta, pero estoy contigo en eso de que una, porque quiere, por instinto, por supervivencia y por todo, nada hacia donde las burbujas del mar se dirigen.
laMar, eres admirable.
¿Has leído el poema "Para Julia" de José Agustín Goytisolo? No la canción, que se queda a medias.
Es mi favorito. A mí me pone las pilas. No sé qué da cuerda el reloj a los demás, pero a mí me encanta.
Me ha encantado esta reflexión.
Somos como somos, pero yo estoy con todos los que piensan que hay a veces, otras veces no, una herencia genética, otras veces ambiental, en fin, y siempre una puede al menos intentar no quedarse parada, ¿no? Creo que es lo que todos tratamos de hacer en este mundo cuando tratamos de encontrar nuestro rumbo.
Al menos yo. Pero parezco ser más lentorra que el resto. No me importa. Aprendí que soy feliz así: me quiero, tengo que quererme, y vivo el momento haciendo mi camino no sufriendo la ansiedad hacia la meta.
Ya dije que soy más lenta.
Jajajja.
Pero aprendo mucho en el camino. Así que gracias por estar aquí todos, que aprendo de vosotros y de ti, laMar, especialmente.