En una conversación con mi madre no hace mucho, hablábamos de mi padre y me comentaba con cuidado, como si temiera mi reacción, que quizás le tenía idealizado. Mi respuesta no fue airada en absoluto, posiblemente daba esa impresión, debía explicarme.
No, no he hecho de él un mito, mi padre era una persona y como tal tenía virtudes y defectos, muchos o pocos es algo que se me escapa.
Yo iba a cumplir cinco años pocos meses después de su fallecimiento ¡sólo recuerdo las cosas buenas! las malas o regulares no aparecen y las que ahora sé poco varían mi opinión, era una persona imperfecta como lo somos todos.
Esos recuerdos fantásticos que conservo de él son reales, mi madre se quedaba de piedra cuando le contaba alguno de ellos ¿Como puedes acordarte de eso Chary? ¡Eras una cría!
Pero no estuvieron siempre conmigo, aparecieron al final de mi adolescencia. Aunque en aquellas clases a modo debate en el colegio yo fuera la contestona, la que renegaba de la existencia de dios a causa de la temprana muerte de mi padre, esos recuerdos aun no me acompañaban.
Cuando empecé a recordar fue la figura de mi padre la que se convirtió en imprescindible. Sé que nadie lo somos, pero su presencia en determinada etapa de mi infancia si la consideré vital, esencial e indispensable.
Los fines de semana y las vacaciones hubieran sido familiares y los domingos comida en casa de los 'abuelos' como mucho.
Aquellos recuerdos están atrozmente relacionados entre si lamentablemente, de ahí que la existencia de aquella querida imagen paternal que buscaba era la de mi príncipe defensor.
Pero no deja de ser un ¿Qué hubiera pasado si ...? carente de argumento y la Vida tiene otros interrogantes, un viaje al pasado ya desgastado que ahora tiene otros destinos, y la búsqueda de un porqué sin respuesta cuya solución es mi rebeldía.
Mi madre respiró, lo entendió, no existía el mito.
Amo a mi padre por el cariño infinito que nos regaló.
Miro a mi hermano y físicamente es él. Me enorgullece llevar su apellido, cuando dicen que me parezco a él ¿en lo bueno? ¿en lo regular? ¡Que más da!
No, no le tengo idealizado, es mi padre.
No, no he hecho de él un mito, mi padre era una persona y como tal tenía virtudes y defectos, muchos o pocos es algo que se me escapa.
Yo iba a cumplir cinco años pocos meses después de su fallecimiento ¡sólo recuerdo las cosas buenas! las malas o regulares no aparecen y las que ahora sé poco varían mi opinión, era una persona imperfecta como lo somos todos.
Esos recuerdos fantásticos que conservo de él son reales, mi madre se quedaba de piedra cuando le contaba alguno de ellos ¿Como puedes acordarte de eso Chary? ¡Eras una cría!
Pero no estuvieron siempre conmigo, aparecieron al final de mi adolescencia. Aunque en aquellas clases a modo debate en el colegio yo fuera la contestona, la que renegaba de la existencia de dios a causa de la temprana muerte de mi padre, esos recuerdos aun no me acompañaban.
Cuando empecé a recordar fue la figura de mi padre la que se convirtió en imprescindible. Sé que nadie lo somos, pero su presencia en determinada etapa de mi infancia si la consideré vital, esencial e indispensable.
Los fines de semana y las vacaciones hubieran sido familiares y los domingos comida en casa de los 'abuelos' como mucho.
Aquellos recuerdos están atrozmente relacionados entre si lamentablemente, de ahí que la existencia de aquella querida imagen paternal que buscaba era la de mi príncipe defensor.
Pero no deja de ser un ¿Qué hubiera pasado si ...? carente de argumento y la Vida tiene otros interrogantes, un viaje al pasado ya desgastado que ahora tiene otros destinos, y la búsqueda de un porqué sin respuesta cuya solución es mi rebeldía.
Mi madre respiró, lo entendió, no existía el mito.
Amo a mi padre por el cariño infinito que nos regaló.
Miro a mi hermano y físicamente es él. Me enorgullece llevar su apellido, cuando dicen que me parezco a él ¿en lo bueno? ¿en lo regular? ¡Que más da!
No, no le tengo idealizado, es mi padre.
Pues tienes mucha razón, las personas somos seres con virtudes y defectos, lo que pasa en ocaciones es que el amor que sentimos nos hace sublimar a la otra persona, hasta que sucecen las cosas que siempre pasan y recien caemos en la cuenta que tambien tienen defectos, es bueno tenerlos presente.
ResponderEliminarPrimera vez que el leo. Saludos.
Es inevitable, la perfección humana no existe pero intentamos verla en los seres queridos.
EliminarBienvenido, estas en tu casa :)
Saludos
Es muy bonito recordar a los seres queridos. Yo creo que mientras los recordemos todavía permanecen vivos en nuestra mente. Hace tiempo perdí no solo a mi padre sino también a una de mis hermanas y todavía recuerdo las grandes cosas que ambos tenían y sobre todo como católico pienso que ellos desde el cielo velan por nosotros para hacernos un poco más buenos, para ayudarnos y aconsejarnos.
ResponderEliminarAcordarse de los seres queridos es una manera de honrarles. Un fuerte abrazo AMIGA.
Es cierto, aunque yo era muy pequeña y han pasado muchos años desde entonces, es mi padre.
EliminarBesos enormes mi niño :)
Pues yo te puedo decir, siendo consciente de que tienen defectos, que idolatro a mis padres... y cada día más.
ResponderEliminarUn beso enorme cielo.
¡Por supuesto! yo idolatro a mi padre y aun más a mi madre, pero con la idolatría que significa amor inmenso, no la que crea idolos que pueden caer.
EliminarBesos enormes mi querido escritor :)
A veces tenemos más recuerdos de los tiempos más alejados de la actualidad. La mente es inexplicable, pero imagino que de un padre se tienen "casi siempre" buenos recuerdos. Abrazos
ResponderEliminarTienes razón, los míos son muy buenos. Pero como tú dices la mente es inexplicable y esos recuerdos maravillosos se unen tristemente al horror.
EliminarBesos enormes mi niña :)
Decía Benedetti: "Se ve más bonito el invierno desde la primavera". Desde el recuerdo, las personas son infinitamente mejores y los padres, los padres son esos seres que te aman sin esperar nada a cambio...es bueno idolatrarlos
ResponderEliminarNo seré yo quien rectifique al gran Benedetti ;) jejeje.
EliminarTienes toda la razón dan todo sin esperar nada.
Besos :)
la naturaleza humana tiene muchos rasgos bellos y otros no tantos, sólo hay que girarlo para buscar el ángulo que lo haga más bello.
ResponderEliminarmuy emotiva tu confesión :-)
Salu2
Hay mucha belleza, merece la pena disfrutarla.
EliminarGracias mi niño :)
Es tu padre Chary, tú lo has dicho y tu mente infantil fue capaz de guardar recuerdos ara que tuvieras algo en los que refugiarte. Nadie se va del todo mientras esté en nuestro recuerdo, por eso te acompañará siempre.
ResponderEliminarBesos Chary
Siempre. Desde que regresaron los recuerdos no dejo que se vayan.
EliminarBesos enormes mi niña ;)