20 abril 2010

Si ...

Si ...


Si me miras hazlo a los ojos.
Si me hablas hazlo de frente.

Si me acaricias pones dulzura.
Si me abrazas añades ternura.

Si me besas nace la pasión.
Si me sientes no esperes.

Acércate

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18 abril 2010

Responsabilidad, madrugar y pasa lo que pasa

Responsabilidad, madrugar y pasa lo que pasa
Allá por 1973 mi madre me llevó por vez primera al dentista, tenia diez años.
¿La causa? Un diente que a todas luces estaba de más ¡lo teníamos clarísimo! pero, ya se sabe lo que ocurre en esto casos, tu tienes una opinión muy clara peeeeero el doctor experto en la materia tiene la suya propia. Según él, el diente no sobraba, estaba donde no debía.

A partir de ese día me esperaban casi cuatro años de visitas periódicas a su consulta ¡a las ocho de la mañana! Si si habéis leído bien, mi madre acordó esa hora de visita para que yo no perdiera clase ni ella tiempo en el trabajo ¿alguien me preguntó? ¡por supuesto que no! Vamos a ver ¡mamá eres funcionaria! Nada no hubo manera, allí estábamos cada día a las ocho de la mañana.

Empecé mi tratamiento de ortodoncia, algo que hoy casi todo el mundo conoce e incluso se lo hace por estética simplemente, y ese no era mi caso, pero entonces era casi desconocido, es más, mi dentista hizo la tesis doctoral con mi boca ¡más majo él ...! Me colocaron los brackets pero, claro, los de entonces no tenían nada que ver con los de ahora, los míos eran un anillo completo puesto en cada diente, es decir, ¿os acordáis de aquella película de James Bond en la que uno de los malos tenia los dientes de hierro? ¡esa era yo! Pero mi habitual optimismo continuaba y no me afectaba en lo más mínimo, eso si, en la fotos sólo sonreía. Los días de consulta tenían algo bueno, antes de entrar a clase mi madre y yo desayunábamos tranquilamente un café con las mejores porras de todo Madrid en una cafetería cercana al colegio.
El resultado de aquellos madrugones los podeis comprobar en la foto que acompaña este texto.

Así fue pasando el tiempo, y llegó el 20 de noviembre de 1975 ¿y donde estábamos nosotras a las ocho de la mañana? ¡exacto! en el dentista y por supuesto sin enterarnos de nada, porque mi madre a esas horas nunca ponía la radio del coche y el dentista se acababa de levantar, que para eso tenía la consulta en su casa y lo de dormir se lo podía permitir. Así es que salimos de la consulta, nos dirigimos a nuestra cafetería, pedimos el desayuno de siempre, ...... y el camarero nos miraba entre alucinado e incrédulo porque, claro, yo iba con el habitual uniforme escolar, hasta que el pobre no pudo más y le soltó a mi madre.

- Perdone que le pregunte ¿usted no se ha enterado verdad?
- ¿Enterarme de que?
- Pues de que ¡Franco ha muerto!

Si la imagen fuera un dibujo animado los ojos de mi madre hubieran salido de las órbitas unas cuantas veces a modo de muelle.

- ¿Qué?
- Pues eso, que ha muerto Franco. ¡Pero si no hablan de otra cosa en la radio!
- Ya ... bueno ... es que ... la radio del coche ... no funciona (¡mentira!).
- Se han declarado tres días de luto oficial, así es que la niña no tiene colegio. (no tengo claro si fueron tres días o una semana).

Sólo dos personas en el Mundo no se habían enterado de la noticia del día, del año, de la década, de nuestra historia ¡mi madre y yo!

¡¡¡Bieeeeeeeeeeen!!! En aquel momento me alegraba por lo de no tener que ir al colegio, poco después celebraría la muerte del dictador plenamente consciente de lo que aquello significaba. Así que me fui para casa tan tranquila y tan contenta mientras que mi madre se iba al Ministerio a ver que pasaba.

Esa es mi madre ¡la responsabilidad en persona!

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16 abril 2010

Musas perdidas

Musas perdidas

Esta semana tengo turno de tarde en el trabajo y llego a estas horas a casa. Cansada, sobre todo si el insomnio se empeña en complicarme el descanso y se presenta sin ninguna intención de irse como ha sido el caso. No dormir y cumplir con mis obligaciones se vuelve muy complicado. Encima las musas han desaparecido, no sé donde c...o se han metido que no aparecen, pero es que, además, tampoco han terminado lo que tenían pendiente. Siempre tengo alguna historia a medias, me gusta ir apuntando aquellos recuerdos que merecen ser contados y, luego, las musas se encargan de ir dandoles forma, esta vez ¡ni eso han hecho!
Las he buscado por todos sitios pero nada, ni idea donde pueden andar. De repente anoche me acordé ¿se habrán ido con el Nano y el Flaco? Pero después de escucharles creo que no.
Seguiré buscando, mientras os dejo en las mejores manos.




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14 abril 2010

Feria

Feria
¿Conocéis eso de "no me toques las palmas que me conozco"? Bien, pues así era yo, y para prueba esta foto que forma parte de un reportaje que me hizo mi padre cuando tenia tres añitos, pero reportaje en toda regla ¡unas sevillanas completas!
En cuanto oía música o me jaleaban un poquito ahí estaba yo ¡ole que ole!
Pasados los años dejé de verle la gracia a las sevillanas y las olvidé, bailaba y cantaba otras cosas.

Y os preguntareis ¿a qué viene esto? Muy sencillo ¡Huele a Feria! Se siente en el aire la Feria de Abril en Sevilla y como este año no voy me puse nostálgica.
Si alguien me dice hace años que me iba a convertir en una loca de la Feria le hubiera dicho:
- ¡Anda ya! ¿Pero aun no me conoces? No me gustan las aglomeraciones, tampoco las sevillanas y ni por asomo pienso aprender a bailarlas. Me gusta Sevilla pero no iré en Feria.

¡Ja! Con lo guapa que estoy callada, porque fui, por trabajo pero fui, y me fascinó.
A partir de entonces he ido casi todos los años, siempre por trabajo (una excusa inmejorable) y cada vez me gustaba más.

No puedo explicar que es lo que tiene, hay que vivirla para saberlo y esto se lo he dicho todos los que me dicen ¿la Feria? Si, hay que ir por lo menos una vez, o te gusta o la aborreces, pero hay que vivirla al menos una vez.

Y no sólo la de Sevilla, también me encanta la de Córdoba, la de Jerez y la de Huelva, cada una es diferente y cada una tiene algo especial.
El ambiente, la alegría, la luz, los colores, los caballos, la portada, las casetas, los trajes, las calles, El Real de la Feria engalanado... Todo se llena de algo especial que te envuelve y te atrapa.

En fin, aquí me quedo con mi nostalgia ¡otro año será!

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13 abril 2010

Espero

Espero

Hay decisiones y conversaciones que he ido postergando ¿mal? Bueno, según se mire.

Siempre he sido muy visceral e impulsiva, todo era ¡ya! ¡ahora! Y casi siempre me he equivocado, ... bueno, hay algunas veces que no me ha ido tan mal, por ejemplo cuando me lancé en picado a por mi chico viendo que él no lo hacía, fui directa a por él, le cogí la cara y le di nuestro primer beso y ¡menos mal que lo hice! porque era tan tímido que todavía podía seguir esperándolo y sin embargo, gracias a mi impaciencia, hoy seguimos juntos.

Ahora he aprendido a mantener cierta calma, a esperar o contar hasta cien.

Evidentemente hay cosas que me gustaría despertarme y que estuvieran solucionadas, son esas que me duelen a nivel personal, en esto si que no he cambiado e insisto y vuelvo ha insistir dejándome llevar por el corazón.
El resto, sé que llegará el momento de enfrentarlas y hay estaré para hacerlo.

Son decisiones laborales, conversaciones a nivel directivo que he dejado aparcadas porque simplemente aun no me encuentro preparada. Primero he de terminar de arreglarme yo para luego arreglar lo demás, aunque en realidad no se trate de arreglar si no de aclarar, dar mi versión y mantenerme firme en mi posición, aunque pueda parecer que no sirve de nada a mi sí me sirve.

El acoso laboral y personal no puede seguir estando oculto en un entorno que se supone social, cultural y humanitario. La verdad sobre lo que ocurre en “la joya de la corona” de las Relaciones Laborales en la empresa para la que llevo trabajando casi treinta años tiene que conocerse y no me importan las consecuencias porque yo ya las he sufrido.
Sólo necesito algo más de tiempo, sólo un poco más.

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12 abril 2010

Hoy hace un año

Hoy hace un año

Autor y compositor inmenso, Antonio Vega murió el 12 de Mayo de 2009. Sus canciones inolvidables forman parte de la vida de muchos, en mi caso, van unidas a mi adolescencia, a la llegada de la democracia, a la tan traída y llevada "movida madrileña", a la revolución musical que empezaba en aquellos años. A finales de los setenta formo el grupo Nacha Pop junto a su primo Nacho García, pero no será hasta 1980 cuando saldrá a la luz  su primer disco, titulado Nacha Pop, que supuso el inicio imparable hacia el éxito. Este disco contenía la, que sin duda, es su canción más conocida, la que todos hemos cantado más de una vez y que se convirtió en el himno del grupo, 'La chica de ayer'.
En 1988 Nacha Pop se separó y Antonio Vega comenzó su carrera en solitario, una carrera llena de altibajos en la que grabo seis discos con un éxito muy dispar. Evidentemente ya era una figura de culto, contaba con el apoyo de los fans, la industria discográfica y todo aquel que era alguien en el mundo de la música. Sus composiciones seguían siendo geniales y quien más y quien menos quería cantar con él o alguna de sus canciones. Pero su vida estaba marcada por los excesos y el consumo de drogas, en esto creo nadie se engaña, como en el caso de Enrique Urquijo (Los Secretos) otro grande de la música que fue encontrado muerto en un portal, dicen que el de su camello. Pero al final Antonio Vega vivió la vida que él eligió vivir a pesar de "el enemigo que llevaba dentro" como dijo Miguel Ríos durante el entierro del artista.

El pasado viernes se celebró un macro concierto homenaje al que asistieron más 10.000 espectadores y 25 artistas y grupos. Y como yo no pude estar, algo que lamento de veras, hoy va mi homenaje para ti Antonio, y lo hago con la canción que tu siempre elegías cuando te preguntaban con cual de todas las que compusiste te quedabas, aquí está, 'Lo que tú y yo sabemos'.

Salir, tocar para verte sonreír,
coger al vuelo el sentido de vivir.
Y después, a la hora de volver
conservar el secreto en mi poder.

Un viaje más, olvidar la luz de un bar,
durmiendo mal y soñando con cantar.

Y después, a la hora de volver,
conservar el secreto en mi poder.

Sólo al final tiene sentido la soledad,
cuando el silencio es total
no queda nadie en el local.
Mil caras que estudiar,
mil caras que olvidar.

Correr, sudar, no hay manera de engordar,
sobrevivir al veneno de tocar.

Sólo al final cobra sentido la soledad,
cuando el silencio es total
queda el espacio para pensar.

Y después, a la hora de volver,
conservar el secreto en mi poder.

Algo que tú y yo sabemos.
Algo entre tú y yo, no hablemos.




PD: Ejem, como habréis comprobado me he adelantado un mes.

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