Huele a Vida, a Libertad

Huele a Vida.
Color imaginación. Suave y fresca.
Descubro su interior, húmeda y dulce.
La saboreo.
Aparecen las sensaciones.

Huele a Libertad.
Color intuición. Suave y fresca.
Descubro su interior, húmeda y excitante.
La saboreo.
Aparecen las sensaciones.

Vida y Libertad,
imaginación e intuición,
las sensaciones del alma, del corazón.

Los cinco sentidos tentados, imaginando,
intuyendo y sintiendo el deseo, la pasión.

Jugando, respirando, viviendo en libertad
la llamada, el clamor y el ansia del Amor.

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Crear, deshacer, corregir

El Museo de Arte Metropolitano de Nueva York presenta en el año 2010 una exhibición de Pablo Picasso con obras de su patrimonio pero bajo una nueva mirada. Pinturas hechas sobre pinturas descubiertas con un estudio de Rayos X ofrecen una visión diferente de uno de los padres del Cubismo.
Para la exposición, los conservadores utilizaron las técnicas de radiografía y reflectología para examinar más de cerca todas las pinturas del museo antes de la muestra, y descubrieron que, con más frecuencia de lo que se pensaba, Picasso pintaba nuevos trabajos sobre obras ya terminadas.
“La comida del hombre ciego” es uno de los ejemplos de las obras exhibidas en el Museo de Arte Metropolitano de Nueva York que Picasso pintó sobre el boceto de otro cuadro.
Este año, con las técnicas utilizadas ya Nueva York, sacaron a la luz una pintura del artista español Francisco Goya que estaba oculta bajo otro de sus cuadros.
Debajo del “Retrato de Jovellanos en el arenal de San Lorenzo (1780-1782)”, descubrieron a  una mujer joven de identidad desconocida, una técnica que no resulta inusual en la obra del autor.
Según explicó Clara González-Fanjul, la conservadora del Museo de Bellas Artes de Oviedo, donde está la obra Goya, “El pintor acostumbraba a utilizar un retrato antiguo como base para hacer otro, lo que le permitía pintar más rápido retratos de sus amigos.”
Fuentes: m24digital. y Observador digital.

Sobre un lienzo en blanco puedes crear un boceto que puede o no, ser la obra definitiva. Vas añadiendo colores que no ayudan a lo que querías transmitir. Incluso el título que le das, de repente cambia.
Por eso existen los pinceles y no con la función deshacer. Existen los pinceles y si con la función de crear.
Se utilizan para plasmar sentimientos a través de lineas, trazos, formas, y juegos de intensos, suaves o apagados colores. Los colores llegan inspirados por el corazón y el ánimo, por lo que vemos y sentimos. Todo para que el lienzo cobre vida y transmita infinidad de sensaciones.
Si deseas volver hacia atrás en el tiempo para no cometer lo que consideras fue un error, deshecha lo que pintaste y vuelve a empezar. Pero la imagen seguirá ahí, por mucho que intentes borrarla, no desaparecerá. Aunque pintes sobre ella con nuevos pinceles y diferentes colores, siempre quedará el rastro de lo que tu llamas, sientes y crees que fue un error.

Y aunque no pintes una sobre otra, debajo del cuadro siempre quedará un lienzo en blanco.

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Amor, pasión

No te vayas. No, aun no.
No te duermas. No, aun no.

Aun nos queda amor,
deseo, pasión.
Aun están nuestros
cuerpos enlazados.
Por el mío aun corren
escalofríos de tenerte cerca,
y el tuyo aun esta excitado.

Habrá tiempo para dormir
cuando estemos agotados
de darnos placer el uno
al otro, cuando al fin
nos quedemos saciados,
tú de mi y yo de ti.

Aprovechemos el amor
que nos está esperando.
Dejemos que la pasión
sea dueña de cada acto.
Apuremos el deseo hasta
quedar exhaustos y si
nuestros cuerpos nos
piden repetir, repitamos.

Hasta que al fin nos
quedemos saciados,
tú de mi y yo de ti.

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Mi libertad

Mi libertad pasa por aprenderme, por recuperar esa autoestima que no sé por donde anda, por saber que yo sola puedo y convencerme de que es así.

No soy la mitad de nada ni de nadie, soy una sola persona y entera. Por eso la idea de pertenecer alguien nunca entró en mis planes. Necesito mi espacio y mi libertad de la misma manera que él la necesita aunque no se haya dado cuenta, pero al final lo agradece. Compartir mi vida con la persona que amo. Complementarnos y ser felices el uno con el otro. Conocerle mejor que a mi misma y que él sienta y conozca lo mismo de mi. Que sintamos y necesitemos lo mismo. Que exista el respeto y no perder nunca la educación ni los buenos modales, pero sabiendo que ni él me pertenece ni yo a él. Querernos de verdad, con locura, y que jamás desaparezca la pasión, ni el deseo mutuo. Que el amor sea duradero y ambos deseemos que así sea, aunque sepamos que nada es eterno. Por eso hay que cuidarlo, que cada día sea un día nuevo, diferente y sorprendente. Hay que mimarlo y disfrutar cada momento, pero sabiendo que ninguno somos la mitad del otro, que somos piezas completas en la relación.

No soy una mitad ni quiero serlo, quiero ser yo y eso implica que soy única, como cada uno de nosotros.
Somos personas completas, y saberlo es tan necesario como amar y ser amado, tan imprescindible como vivir.

Esa es mi libertad, no ser la mitad de nada ni de nadie.

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¡Agua!

Ya os conté en otro post que estoy convencida de que en alguna de mis otras vidas fui sirena, pero convencida, segura y no tengo ninguna duda.

Aquí en la sierra las piscinas abren más tarde, normalmente el quince de junio aproximadamente. Y como el año pasado estuve castigada por el parto con cesárea de los dos aliens, este año será mi venganza. Esto quiere decir que estaré a remojo todo lo que pueda y más. Pienso ser la primera en estrenarla por la mañana y la primera por la tarde.

Mi programa es el siguiente:
Según llegue, darme la ducha reglamentaría y tirarme de cabeza al agua, hacer todos los largos que pueda (la piscina tiene las mismas medidas que una olímpica) a braza, espalda y crowl (también se nadar a estilo mariposa, pero como es tan escandaloso me da un poco de vergüenza). Entre largo y largo descansaré en la parte que no cubre y jugaré como los niños, es decir, haré el pino, daré volteretas, bucearé, me sentaré en el suelo .... y vuelta a empezar con los largos mientras el cuerpo aguante ¿resultado? que saldré hecha una pasa, con los dedos arrugados como los niños. En cuanto me seque, a casa y por la tarde volver a empezar.
A parte de disfrutar de lo que más me gusta, el agua, creo que me ayudará a dormir mejor. La paliza va a merecer la pena si lo consigo, y sino también.

Claro, que todo el plan se puede alterar si ¡por fin! me dan el alta, y en vez de dos veces al día, se limitará a una, pero no me importa.

¡¡¡Por fin voy a disfrutar del agua!!! ¿No es genial?

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Caricias para darte

Tengo caricias para ti esperando
que me digas como y donde.
No, no me lo digas, deja que lo intuya,
deja que lo adivine.

Empezaré con las caricias de lo labios
acariciando los tuyos.
Caricias que se volverán húmedas
cuando las lenguas se encuentren
y comiencen su baile.

Mis labios seguirán acariciando tu cuello,
buscando ese punto que sé que te gusta.
Continuaran por tu pecho
y se unirán a labios, a los besos
las caricias del tacto.

Entre besos y manos, las caricias recorrerán
tu cuerpo todo, lo que sé que quieres,
lo que buscas con cada caricia,
con cada  beso, con mis manos.

Las caricias de las palabras
aparecen en el momento justo
para hablar y pedir, que las tuyas
se unan a las mías, y con cada
caricia, ambos buscaremos
lo que deseamos y queremos.

Las piernas entran en el juego de la pasión,
se enlazan o sueltan según nos movemos.
Aparece el ansia, el deseo,
la necesidad del sexo, la caricia
que nuestros cuerpos
buscan y encuentran.

Y con la caricia del éxtasis y el placer,
aun quedan caricias que dar,
las del amor que me entregas,
las del amor que te doy. 

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